Tarta de chocolate hipoalergénica

Bueno, pues este fin de semana se ha celebrado en casa una fiesta de cumpleaños. Había dos opciones: hacer la tarta, o no catarla. Evidentemente, opté por la primera. Elegí la receta de las magdalenas quitapenas, multiplicando por tres las cantidades, para que saliera un bizcocho grandecito...

Ingredientes

Para el bizcocho

270 gr de harina sin gluten mix dolci, de shär

180 gr de azúcar

1/2 sobre de levadura

3 sobrecitos de refrescos "El Tigre"

1 cucharadita de sal

900 ml de chocolate a la taza de naturgreen

90 ml de aceite de oliva

Para rellenar el bizcocho

mermelada de naranja agria

1/2 vaso de agua

tres cucharadas soperas de azúcar

Para la cobertura

una tableta de chocolate que sea apto (yo utilicé un chocolate artesano que me traen de Francia)

una cucharada de margarina

un chorreón de leche de arroz

Unas fresas y un poquito de hierbabuena para decorar

Preparación

Precalentamos el hormo a 180º. Ponemos en el vaso de la thermomix los ingredientes secos para hacer el bizcocho: harina, azúcar, levadura, refresquillos y la sal, y los mezclamos unos segundos a velocidad 5. Luego incorporamos el chocolate y no nos olvidamos (como me ha pasado a mí) de añadir el aceite. Mezclamos hasta que la masa esté toda bien integrada y sin grumos, velocidades 3- 5- 7. Lo vertemos en un molde y al horno. Hasta que veamos que está hecho, depende de los hornos, y los moldes, pero los 40 minutos no nos los quita nadie...

Cuando el bizcocho esté frío (yo lo hice la víspera), lo cortamos en tres discos, y preparamos la mermelada, con un poco de agua caliente y algo más de azúcar, y regamos los discos. Los volvemos a montar. La mermelada es casera, la hace mi madre con las naranjas enteras. En la foto se aprecian los trocitos de cáscara.

En un cuenco al baño maría, calentamos una cucharada de margarina y la tableta de chocolate en onzas, con un chorreón de leche de arroz. Cuando el chocolate está derretido, cubrimos el bizcocho y lo decoramos con las fresas.

Está deliciosa. Yo creía que iba a empalagar, pero el contraste de la mermelada con el chocolate es ideal. La tarta triunfó y gustó más que el flan que se ve detrás... jejeje