martes, 1 de noviembre de 2011

Gachas

Como es tradición, para los Santos hay que hacer gachas, y por supuesto, hay que comérselas. Hay gachas de leche, gachas de agua, gachas de vino... gachas para todos los gustos. Mi vecina y casera me ha pasado un cuenquito con las gachas tal y como se hacen en Baena, que poco o nada tienen que ver con la receta que os propongo hoy, las gachas de leche que hacía mi abuela. Mi madre me ha pasado amablemente la recetilla, y aquí la tenéis, para que os animéis a hacerlas y os chupéis los dedos:


Ingredientes:
  • Tostones de pan
  • Anís en grano
  • 1,5 litros de leche
  • Una ramita de canela
  • La cáscara de medio limón
  • 6 cucharadas soperas de azúcar
  • 9 cucharadas soperas de harina
  • Una pizca de sal
  • Aceite de oliva
  • Canela molida para decorar
Preparación

En el aceite no demasiado fuerte, freímos los tostones de pan, y los reservamos. Con la sartén retirada del fuego echamos el anís para que no se queme, se añade la leche (1 litro), la cáscara de limón, la canela en astilla, la sal, el azúcar y esperamos que se caliente bien (a punto de hervir), se baja el fuego y se va añadiendo sin dejar de remover el medio litro de leche en el que, previamente y en frío, hemos batido la harina. Una vez que está todo se sube un poquito el fuego hasta que hierve durante unos diez minutos siempre sin dejar de remover.

Volcamos la sartén en una fuente, y le sacamos la ramita de canela y la cáscara de limón, adornamos con los tostones y con la canela molida.

Estoy deseando que se enfríen...

lunes, 31 de octubre de 2011

Repápalos

Los repápalos son un plato típico de mi pueblo, Fuente Obejuna. Mi abuela Isabel los hacía, y yo los hice por primera vez ayer. Es un plato fácil, rico y muy baratito. A la abuela Isabel, al contrario que a la abuela Maruja, la cocina le gustaba de poco a nada... Así que tendremos pocas recetas de su cosecha. Claro que, para remediar este "mal", tenemos a la Tati, mi tía de mi alma, que cocina estupendamente, y hace unos bocadillos de flamenquín troceado con patatas fritas que resucitan a los muertos. La Tati me ha ido pasando algunas recetillas, y otras que vendrán... La de los repápalos, es suya. Pero para no faltar a la verdad, tengo que deciros que la redacción de la receta es de mi madre, que me la mandó ayer por email.

Ingredientes:
Para el caldito
·                    1 cebolla
·                    3 dientes de ajo
·                    1 tomate
·                    1 pimiento
·                    1 hoja de laurel
·                    1 pastilla de caldo
Para la masa de los repápalos
·                    2 huevos
·                    1 diente de ajo
·                    1 ramita de perejil
·                    Sal
·                    Pimienta
·                    Pan rallado (6 cuchadas soperas)


Preparación:
En una olla se pone el aceite para hacer el sofrito (cebolla y ajo, cuando estén flojitos se añaden el pimiento y el tomate), hecho el sofrito se pone una pastilla de caldo, el laurel y como medio litro de agua y se deja hervir.
Mientras tanto se baten los huevos, se les pone sal, pimienta , un diente de ajo picado menudito, el perejil picado igualmente y el pan rallado. Se mezcla todo muy bien y con la medida de una cuchara se van echando en una sartén con el aceite no demasiado caliente para freirlos, al sacarlos se incorporan a la olla y se dejan cocer hasta reducir el caldo a gusto de la cocinera y sus comensales…


lunes, 17 de octubre de 2011

SOPAS PRIMITIVAS

Yo no me lo explico... con lo delicadita que era de pequeña para comer, no alcanzo a entender cómo podían gustarme tanto estas sopas... supongo que fue gracias al ingenio de mi madre, al bautizarlas con semejante nombre... Sopas primitivas,... y te imaginabas a los hombres de las cavernas... el caso es que ese día, la niña comía sin protestar...

INGREDIENTES
Ajo
Pimiento verde
Tomate
Espárragos verdes
Salchichas frescas
Sal
Pimienta
Azafrán en hebra
Una pastillita de caldo
Aceite de oliva
Agua
Un poquito de pan
Uvas

PREPARACIÓN
En una cazuela, hacemos el sofrito con el ajito, el pimiento verde y el tomate, picados muy finos y una poquita de sal. Añadimos los espárragos troceados y las salchichas y rehogamos bien.
Ponemos el azafrán, un poquito de pimienta (no mucha, que las salchichas normalmente llevan una poquita), la pastilla de caldo y agua, y dejamos cocer.
Al tiempo de servir la sopa, le añadimos rebanados muy finas de pan (de ayer) y le damos un hervor.
Se comen acompañadas de uvas.

La mezcla de sabores es exquisita, el dulzor de la uva se mezcla con el toque de la pimienta y el sabor de los espárragos, es una verdadera delicia...

miércoles, 12 de octubre de 2011

Lengua de Ternera

Hace un par de semanas, mi madre celebró su jubilación, y en la fiesta me reencontré con amigos de la familia, amistades que se remontan a mi niñez. Y charlando, charlando, Pruden me habló maravillas de la lengua de ternera. Yo había visto a Arguiñano prepararla alguna vez, y después de que Pruden me diera la receta, he estado dos semanas rondando la idea en la cabeza. Y como me han dicho que no me quede con ganas de nada... pues me he puesto manos a la obra... no vaya a ser que salga mi niño con un toro tatuado porque su madre no guisó la lengua de ternera.
Así que el viernes pasado, ni corta ni perezosa, fui a la carnicería, pero claro, no tenían.  Diego (mi carnicero de confianza) me la encargó, y el lunes fui a recogerla. Santi ha comido hoy lengua, y yo, que tengo el día raro, sólo me he comido las patatas, eso sí, mojaditas en su salsa. Muy rica.

Ingredientes
  • Una lengua de ternera
  • cebolla (2)
  • laurel
  • ajos (7 u 8 dientes)
  • pimienta en grano
  • tomillo, sal, agua
  • aceite de oliva
  • harina
  • zanahorias
  • 1 cucharada de ketchup
Preparación

En la olla a presión, ponemos la lengua lavada con el tomillo, una cebolla, dos o tres dientes de ajo, el laurel, la pimienta y la sal, y la cubrimos de agua. Se cuece durante 45 minutos.

Esta es la lengua tal y como llegó de la carnicería








Una vez que la lengua está cocida, la sacamos de la olla, la pelamos (se pela muy fácil), y la fileteamos:




La pasamos por harina, y la freímos en una sartén (no muy grande), en la que habremos puesto previamente un buen chorreón de aceite de oliva. Conforme vamos friendo los filetes, los pasamos a una cazuela con agua, en la que irán cociendo a fuego muy suave.

Cuando están todos los filetes en la cazuela, lavamos muy bien, y echamos en la sartén en la que se han frito los filetillos una cebolla, las zanahorias y los ajos, todo fileteado y sin pelar.  Lo rehogamos y le añadimos la cucharada de ketchup. Luego le ponemos un poco del caldito en el que se están cociendo los filetes y dejamos que se cocine.


Pasamos la salsa por un chino y se la añadimos a la cazuela, lo dejamos cocer con la carne, y voi-lá, ya tenemos la lengua lista para servir.



Yo la he acompañado con patatas fritas, pero Pruden me dijo que ella suele acompañarla con puré de patatas...  Otra vez será.

domingo, 9 de octubre de 2011

Oyakodon

No, no es ninguna palabrota. Cuando estuve en Estados Unidos, conocí a Ai, una chica japonesa que se convertiría en una de mis mejores amigas, y con la que compartí, no sólo la experiencia de vivir un año inmersa en una cultura y una sociedad que no era la mía, sino que también aprendí a mirar con los ojos del otro.
Ai vino a España en mayo de 2003, justo antes de volver a su Japón natal, y estando en casa, me enseñó a preparar algunos platos de la gastronomía japonesa. Y éste es uno de ellos.

Oyakodon significa "el padre y el hijo" y el plato recibe este nombre por los ingredientes que lo componen:
  • Arroz
  • Cebolla
  • Pechuga de pollo (el padre)
  • Salsa de soja
  • Una cucharadita de azúcar
  • Huevo (el hijo)
  • Un chorrete de aceite (de oliva)
  • Agua
  • Muy poquita sal.
Para preparar este plato, lavamos el arroz. En el primer lavado, el agua se vuelve del todo blanca, porque se desprende polvillo del arroz. Ai decía que aquello era "dirty", suciedad, lo lavamos hasta que el agua salga clarita, y lo ponemos en un cazo con agua al fuego. Cubrimos el arroz unos dos dedos de agua, y lo cocemos a fuego medio, si hay que añadirle más agua, se le añade poquito a poco, hasta que el arroz esté cocido. Lo suyo es que se quede apelmazado, ten en cuenta que en Japón no se estilan los tenedores, y comer arroz suelto con palillos puede resultar desesperante.

Mientras cocemos el arroz, ponemos en una sartén el chorrete de aceite, y cortamos la cebolla en tiras y se van rehogando con muy poquita sal, cortamos el pollo en trocitos y lo añadimos a la sartén.

 Cuando el pollo ha cambiado de color, añadimos un chorreón de salsa de soja (yo utilizo Kikkoman, en el mercado está la variedad del tapón rojo, que es la clásica, y también podemos encontrar otra, con el tapón verde, con un 43% menos de sal. La salsa de soja es MUY salada, por lo que a mi paladar le gusta más la versión del tapón verde), un chorrete generoso de agua y una cucharadita de azúcar, y dejamos que cueza un ratito.


Cuando el arroz esté listo, lo apartamos del fuego, y le "damos caña" al pollo, la salsa no debe reducir del todo antes de apartarlo del fuego. Batiremos un par de huevos (yo pongo uno por cabeza) y lo añadimos a la sartén, que como está caliente, caliente, liga el huevo.

Para servirlo, ponemos el arroz en el plato, y sobre él, la salsa que hemos preparado. Es fácil, ligero y nutritivo, y además, está muy rico.



Gracias, my dearest Ai!

sábado, 8 de octubre de 2011

Magdalenas de leche

Llevaba ya mucho sin publicar nada en el blog... pero es que estoy "cocinando algo a fuego muy lento", la receta es sólo muuuuucho amor, y en nueve meses estará listo... Un niño estupendo que llegará, si Dios quiere, a finales de enero. Y la verdad es que esta tarea me consume las energías, y no me quedan ganitas para casi nada, ni siquiera cocinar... Hasta que a una le da antojo de algo dulce... unas magdalenas, por ejemplo, y claro, pensar que a este pobre niño le salga un lunar con forma de magdalena en la frente... fue estímulo suficiente para meterme en la cocina.

La abuela acostumbraba a hacer las cosas "a lo grande", y cuando hacía magdalenas, no era menos, por supuesto... Pero para eso estábamos los nietos... ¡para devorarlas!
El día que me animé a hacer las magdalenas de la abuela por primera vez, entendí que las cantidades ingentes que ella utilizaba iban a ser demasiadas para Santi y para mí, así que adapté un poquito la receta, prácticamente, reduciendo las cantidades a la mitad, y así "sólo" salen unas 5 docenas...


Esta es la receta original de la abuela, pero yo os transcribo la adaptación que le hice, no creo que a nadie le apetezca hacer magdalenas en cantidades industriales:

Ingredientes
- 5 huevos
- 450 gr de harina de trigo
- 150 gr de harina de maíz
- 600 gr de azúcar
- 1/2 litro de leche
- 1/2 litro de aceite
- 1 sobre de levadura
- 2 sobres de refresco "El tigre"
- canela al gusto (en esta ocasión, sustituí la canela por esencia de azahar, y el resultado es también estupendo)

Preparación
Precalentamos el horno a 200º.
Batimos las claras a punto de nieve, y vamos incorporando las yemas, una a una, mezclando muy bien.
Añadimos la leche, el azúcar, la levadura, los refresquillos, el aceite y la canela, y se va mezclando muy bien. Por último, añadimos la harina, poco a poco, y vamos trabajando muy bien la masa.
 Yo trabajo la masa con la thermomix, pero tuve que añadir la harina en tres veces, porque con los refresquillos y la levadura, la cosa empezó a subir y casi me rebosa el vaso... Así que lo vertí todo en una ensaladera gigante, y en tres veces tenía toda la masa hecha, luego la mezcle toda muy bien, y listo.
Si se quiere, se puede reservar una parte de la masa, para añadirle una cucharada de cacao, y así hacer magdalenas de dos colores.
Echamos la masa en los moldes de las magdalenas, y las vamos cociendo en el horno, están listas en unos 15 ó 20 minutos.



miércoles, 20 de abril de 2011

Pan de Calatrava


Esta, sí que sí, que es una receta de la abuela Maruja. Además, una de esas cosas, que con sólo nombrarlas me hacía dar saltos de felicidad... qué rico estaba el Pan de Calatrava... Y con lo rico que estaba, pensaba, pobre de mí, que tendría que ser algo muy difícil de hacer... Incierto.

Es la antesala de la felicidad, y aprovechando que hoy venía mi madre a comer, ayer me metí en la cocina y lo preparé en un santiamén (sí, no sólo es fácil y está buenísimo, sino que además lo haces en cinco minutos y sólo manchas dos cacharros)

Para cuatro huevos,
medio litro de leche
1/4 kg de azúcar
60 gr de pan.
Se mezcla todo muy bien y se deja cocer en el  horno- decía la abuela.


Precalentamos el horno a 200º.
Batimos los huevos y le añadimos la leche y el azúcar, seguimos batiendo muy bien, para que el azúcar se deshaga, y le añadimos el pan hecho trozos. Mientras tanto, en un molde de (plum cake) ponemos caramelo en el fondo, y cuando el pan se haya empapado bien, lo vertemos en el molde. Yo lo puse en el horno al baño maría, y bajé la temperatura a 180º. Al principio lo tuve cubierto con papel de aluminio una media hora, y luego se lo quité, y lo dejé otra media. Hoy nos hemos chupado los dedos.
Ay, abuelita, abuelita...




lunes, 18 de abril de 2011

Albóndigas en salsa de mayonesa

Cuando trasladaron a mi maridito de mi corazón a Baena, tuve que pedir asilo político en Málaga durante dos semanas, porque habíamos alquilado nuestro piso y me quedaban esas dos semanas de trabajo. Anabel y Fidel me alojaron en su casa. Anabel y yo no somos hermanas sólo porque no nos parió la misma madre, pero entre nosotras se ha formado un vínculo fenomenal. El caso es que en esas dos semanas, aprovechamos para aprender la una de la otra algunas recetas, y esta, se sale.
Cuando oyes hablar de albóndigas en salasa de mayonesa, no te puedes imaginar la potencia y la intensidad que tiene este plato (aunque te haces una idea de las calorías)

Ingredientes
Para las albóndigas
  • Carne picada (yo suelo utilizar cerdo y ternera al 50%)
  • sal
  • pimienta
  • ajo (yo lo pongo molido)
  • pan rallado
  • perejil picado
  • huevos
  • un buen chorreón de zumo de limón (o vino blanco)
Para la salsa de mayonesa
  • Agua
  • Una pastilla de caldo
  • (podemos sustituir esto por aproximadamente medio litro de caldo, si eres de esas personas a las que no les gusta utilizar las pastillas de caldo)
  • aceite de girasol
  • un huevo
  • zumo de limón
  • sal
Bueno, yo soy un poco brutita para mis cosas, y cuando hago albóndigas, las hago en cantidad. Creo que utilicé un kilo o kilo y medio de carne picada, por lo que me hicieron falta cerca de cuatro huevos. Ya que me pongo, hago albóndigas para la temporada, y las congelo.
Se prepara la masa de las albóndigas, mezclando en una ensaladera la carne picada con la sal y la pimienta, el perejil, el ajito, los huevos, el zumo de limón o el vino, y el pan rallado. Se amasa muy bien. Normalmente, yo hago este aliño por la noche, lo tapo muy bien con film transparente y lo dejo en el frigo toda la noche, o hago la masa por la mañana y lío las algóndigas por la noche, así cogen el gustito del aliño. Hay que sacar la masa del frigo un buen rato antes de hacer las albóndigas, porque si no, se te caen los dedos de lo fría que está la masa.
 Se hacen las albóndigas y se pasan por huevo y pan rallado. Yo las voy poniendo en una bandeja que va directa al congelador, y cuando ya se me han congelado, las paso a una bolsa. Así no se me pegan. Yo suelo hacerlas de un tamaño medianito, y ya que me pongo, algunas las hago con caldo (esas no se pasan por el huevo y el pan rallado)
Para las albódigas con caldo, suelo poner unas seis pelotas por ración, pero para el plato que nos ocupa, con cuatro albóndigas por cabeza, vamos sobrados.
Ponemos en una sartén pequeña aceite de girasol, y vamos friendo las albóndigas. Cuando están fritas, las pasamos a otra cazuela en la que habremos puesto a calentar el caldo (o el agua con la pastilla de caldo), aproximandamente, las albóndigas deben quedarse cubiertas a la mitad. El fuego de esta cazuela debe estar suave.
Cuando hemos frito las pelotas, apartamos el aceite de girasol del fuego, y esperamos a que se enfríe. Hacemos una mayonesa con ese aceitito, que tiene la sustancia de las albóndigas, y vamos aligerando la mayonesa con el caldo de la cazuela en la que cuecen, a su amor, las albóndigas. Vertemos la mayonesa sobre las albóndigas, con el fuego muy flojito, para que no se nos corte la mayonesa, y servimos, por supuesto -y que no falten- con patatas fritas.

Pasta con atún al limón

Al final, en este blog, va a haber recetas de todo quisqui... y hoy le toca a mi cuñado... David es, además de un tío estupendo y un fotógrafo de primera, un cocinillas excepcional. Mientras estuvo en Córdoba, nos deleitó en alguna ocasión con esta pasta, que es rica, fácil, rápida y baja en calorías.
Ingredientes:
  • pasta (yo elegí espaguettis)
  • ajito picado (para ahorrar tiempo, cuando lo tengo, aprovecho y pico un par de cabezas y lo congelo. Calculo que le pondría un par de dientes o tres.) A gusto del consumidor.
  • perejil picado (idem de lo mismo)
  • un par de latas de atún (yo lo puse al natural)
  • un limón
  • queso rallado
  • sal
  • pimienta
  • aceite de oliva de Baena (jeje)
Bueno, pues ponemos a calentar el agua con la sal y cuando arranca a hervir, le añadimos un chorreón de aceite de oliva y cocemos la pasta para que quede al dente.
Mientras, ponemos en una sartén un chorrete de aceite de oliva y freímos los ajitos, aflojamos el fuego y añadimos el perejil, rehogamos y se añade el atún, escurridito y bien desmigado. Cortamos el limón a la mitad y sacamos una rodaja muy finita, la reservamos, y exprimimos las mitades. Añadimos el zumo de limón a la sartén, salpimentamos, y en esto se nos habrá cocido ya la pasta, que escurriremos e incorporaremos a la sartén, mezclamos muy bien y le ponemos el queso rallado.
A la hora de servir, cortaremos en triangulitos la rodaja de limón y pondremos los trocitos sobre la pasta. Está tan rica como fácil y rápida es de hacer, el limón le da un puntito estupendo.

domingo, 3 de abril de 2011

Torrijas

Casi estamos terminando la Cuaresma, y es tiempo de torrijas. No me he podido resistir...

Ingredientes
  • Pan, asentado, en rebanadas
  • leche
  • un chorreón de anís dulce
  • huevo
  • aceite de oliva
  • miel (o azúcar y canela)
Ponemos en un plato la leche con el anís; en otro, el huevo batido y en otro, la miel.
En una sartén honda, ponemos el aceite, y lo ponemos a calentar. Cuando el aceite esté bien caliente, pasamos las rebanadas de pan por la leche, después por el huevo, y se fríen. Las apartamos a un plato con un trozo de papel absorbente, y estando aún calientes, se pasan por la miel.


En lugar de leche y anís, ponemos poner vino (fino).
Y en lugar de miel, azúcar y canela. Pero con la miel quedan más jugositas.

Rabo de Toro

Bueno, esta receta es de las que he aprendido de mi suegra.
El rabo de toro es un plato que pertenece a la cocina tradicional cordobesa, y la verdad es que mi suegra lo borda.

Ingredientes
  • Un rabo de toro
  • una cebolla hermosa
  • 4 ó 5 dientes de ajo
  • un par de zanahorias
  • sal (o avecrem)
  • pimienta
  • laurel
  • nuez moscada molida
  • colorante
  • un vaso de vino tinto
  • agua
  • un chorreón de aceite de oliva





Ponemos en la olla a presión el chorrete de aceite, la cebolla troceada, los ajos picaditos y las zanahorias, en rodajas.
Lavamos los trozos de rabo, y los añadimos a la olla. Le damos marcha, y rehogamos bien, moviendo los trozos con una espátula. Cuando estén un poco rehogados, añadimos el vino tinto y dejamos que reduzca un poco. Ponemos la sal, la pimienta, la nuez moscada, el laurel y el colorante, le añadimos un poco de agua, que no llegue a cubrir del todo la carne, y cerramos la olla.
Depende un poco de la calidad de la carne, pero empezamos por darle 25 minutos desde que empieza a salir vapor, y dejamos que se despresurice sola.
La carne está en su punto cuando se desprende sin problema del hueso. Si tras los 25 minutos previos, ves que no está tierna, dale otros 10 minutillos de presión.
Si al abrir la olla vemos que queda mucho caldo, es conveniente dejarlo a fuego muy lento, para que reduzca sin que se pegue, hasta que quede una salsa con cuerpo.
Está más rico "reposado", es decir, que te toca hacerlo hoy para comértelo mañana. Y con patatas fritas.
En casa nos encanta. Aún recuerdo la cara que se le quedó a mi hermana cuando lo probó por primera vez...

También le puedes poner, en lugar del colorante, azafrán en hebra, y añadirle, además, unos granitos de pimienta.

viernes, 1 de abril de 2011

Solomillo de cerdo al hojaldre con salsa de mostaza

Esta es otra de las recetas de mi cosecha propia. La vi un día en España Directo (sí, de vez en cuando veo esas cosas), y me sedujo para un fin de año.

Ingredientes
  • Un solomillo de cerdo
  • un buen paté
  • dos o tres lonchas de jamón de york, o pechuga de pavo o pollo cocida
  • hojaldre (yo no me complico y lo compro congelado)
  • Un huevo
  • Sal
  • Pimienta.
Para la salsa
  • Una cucharadita de mostaza antigua
  • sal
  • pimienta
  • un brick de nata
  • un chorreón de vino blanco
Precalentamos el horno a 200º.
Ponemos en la plancha el solomillo y lo marcamos, para que se apriete y no suelte mucho jugo. Salpimentamos. Si eliges un paté a la pimienta, abstente de pimienta o se te saltarán las lágrimas al comerlo.
Untamos el solomillo con el paté y lo envolvemos con el jamón cocido. A continuación, estiramos un poco el hojaldre, las planchas de hojaldre congeladas vienen demasiado gruesas para nuestro propósito, y la dejamos de un tamaño que nos permita envolver y sellar muy bien el solomillo.
Un vez hecho esto, pintamos con el huevo batido. Y directo al horno,cuya temperatura bajamos a 180º, por lo menos 20 minutillos, o hasta que el hojaldre esté doradito y crujiente.


Para hacer la salsa, ponemos en una sartén y a fuego moderado- suave, una cucharada de aceite de oliva, y echamos la mostaza, la rehogamos un poquitín y añadimos el vino. Dejamos que reduzca un poquito y añadimos la nata. No dejamos de remover para que no se nos queme y salpimentamos, dejamos que reduzca unos diez minutos.




jueves, 31 de marzo de 2011

Chocolate Chips Cookies, o lo que es lo mismo, galletas de chocolate

He pensado aunar tradición y modernidad, el siglo pasado con el presente, las recetas de mi abuela con las que integran mi propio recetario. Entre mis platos se encuentran los que me enseñó a hacer mi madre, los que he aprendido de mi suegra, que dice que no le gusta la cocina, pero tiene cosas... deliciosas, las que me enseñan amigas de aquí y de allá, y cuando digo allá, es allá bien lejos: recetas que me enseñaron cuando viví en Estados Unidos, recetas americanas y recetas que me enseñó mi amiga Ai, que en japonés significa Amor.

Hoy he hecho galletas, las típicas galletas americanas. En mi receta, que está en inglés, vienen las cantidades expresadas en cups (tazas), que es como las hacen allí, midiendo con su vaso medidor... Hoy me he parado (gracias, Thermomix) a pesar los ingredientes para poder dar las cantidades en gramos, que es más normal entre nosotros.

Ingredientes
  • 260 gr de harina
  • 130 gramos de azúcar blanquilla
  • 130 gramos de azúcar moreno
  • 180 gr de mantequilla atemperada
  • 2 huevos
  • 1 cucharadita (al ras, de las de café) de sal
  • 1 cucharadita de bicarbonato
  • 1cucharadita de extracto de vainilla
  • nueces picadas
  • perlitas de chocolate
Precalienta el horno a 200º.

Ponemos en un bol la harina con la sal y el bicarbonato, y reservamos.

En otro bol, más grande (yo lo hago en la Thermomix), se bate la mantequilla con el azúcar y el extracto de vainilla, hasta que se consiga una textura cremosa (en la máquina, bates primero la mantequilla y luego le agregas el azúcar. Yo he tenido que abrirla varias veces para retirar la mezcla de las parecer del vaso. Velocidad 4)

A continuación añadimos los huevos, de uno en uno, y batiendo muy bien. No agregues el segundo hasta que el primero no esté del todo incorporado.

Poco a poco vamos echando la harina, la masa va cogiendo cuerpo, así que si lo haces a mano, te va a costar un poquito. Ventaja de la thermo.

Ya sólo queda poner las nueces (o cualquier otro fruto seco que te guste) y las perlitas de chocolate. Evidentemente, las nueces son opcionales. El chocolate nunca es opcional. (je je) Envuelve con la espátula.
Como a mi marido no le gusta el chocolate, yo hago una hornada (o dos) de galletas antes de ponerle las perlitas de chocolate.

Para hornearlas, disponemos de un trozo de papel de aluminio, del tamaño de la bandeja del horno, y con una manga pastelera vamos poniendo pegotes de la masa, deja entre pegote y pegote unos cuatro dedos, porque si no, te va a salir una supergalleta. Yo no tengo manga pastelera, y utilizo una bolsa especial para bocadillos, a la que le corto una esquinita. Los pegotes deben ser del tamaño de una castaña, no mucho más grande, porque la mantequilla y el azúcar se derriten con el calor y se extienden bastante.

Se hornean en unos 5 ó 7 minutos, hasta que estén doraditas. A mí me salen unas 6 hornadas, que en total pueden sumar unas 5 docenas de galletas.
Al sacarlas del horno, deja que se enfríen un poco antes de pasarlas a una rejilla, donde se enfriarán totalmente.


Se recomienda que se conserven en una lata. Hay que consumirlas en 4 ó 5 días, porque si no, te puedes encontrar con que se hayan florecido. Es el inconveniente del sin conservantes. Pero vamos, no te preocupes, porque caen. Engordan casi con mirarlas. Yo sólo las hago cuando tengo algo que celebrar, para compartirlas con los amigos. Las de hoy son para una celebración muy especial a la que voy mañana... 25 años de CVX en Málaga. Un regalo.


Ensalada de gambas escabechadas

  • gambas
  • setas (o champiñones)
Para preparar el escabeche:
  • 1/10 l. de aceite de oliva
  • el zumo de un limón
  • perejil
  • 1/2 cucharadita de pimienta molida
  • sal

Se pelan las gambas, y si son muy grandes se parten en dos. Se lavan muy bien las setas y se laminan, se colocan en una fuente las gambas y las setas y se rocían con el escabeche. Se dejan reposar en sitio fresco, al menos durante una hora. Se sirven con lechuga ticada muy gruesa.

Lomo de cerdo con leche

Curioso... curioso...

Para un kilo de lomo, un litro de leche, laurel y sal.

Y esto es todo... Abuelita... ¿en la olla a presión, no?

Riñones al Jerez

"Pedid y se os dará"

Laura, una amiga de Málaga, tiene un blog muy chulo de cocina... siguiéndolo se me ocurrió la idea de hacer éste, y hoy, me ha preguntado si la abuela Maruja tenía recetas que no fueran dulces. Haberlas, haylas. Y aquí tenemos la primera:
Ingredientes
  • Riñones
  • aceite de oliva
  • sal
  • perejil
  • laurel
  • vino
  • caldo de cocido
  • pimienta molida
Se parten los riñones en rodajas y se "marean" (es decir, se rehogan) en el aceite, con la sal, el perejil. el laurel y el vino. Cuando estén rehogaditos, se les echa un poco de caldo del cocido, pimienta molida, y un poco de agua para enternecerlos.
Entendemos que la abuela los tenía a fuego lento.


Roscos del Chico Palacios

  • Para 1 kg de manteca:
  • 1kg de azúcar,
  • 6 huevos,
  • 1 vaso de vino blanco,
  • raspadura de limón,
  • canela
  • ajonjolí (es una semilla, parecida al sésamo)
  • harina, la que admita.
  • un poquito de bicarbonato
Se apartan dos claras para pintarlos antes de meterlos en el horno.

Pestiños de manteca (de Antoñita de Manolito)


Hacer pestiños es todo un arte. Yo todavía no me he puesto, tengo que secuestrar a mi madre para que me enseñe. Sé que son necesarias unas cañas en las que se enrolla la masa a la hora de freírlos, para darle  esa forma peculiar que tiene el pestiño. Y eso es arte. A Dios pongo por testigo de que un día haré pestiños, y entonces os enseñaré cómo es el proceso...
De momento, aquí os dejo la receta, por si alguien entendido en la material pestiñil se atreve... y ya me contaréis:
  • Para 1/2 kg de manteca:
  • 1kg y medio de harina
  • medio litro de vino
  • un chorreón de aguardiente,
  • raspadura de 2 limones
  • sal
  • miel o azúcar y canela.
Después de fritos, se enmelan con miel, o se emborrizan con canela y azúcar.


miércoles, 30 de marzo de 2011

Pastas de tres almendras

  • Para 300 gr de manteca:
  • 300 gr de mantequilla,
  • 500 gr de azúcar fino,
  •  6 huevos batidos juntos,
  • harina, la que admita.
  • almendras para decorar
Se baten la manteca y la mantequilla, se le echan los huevos, el azúcar, y por último, la harina. La masa debe quedar buena para extenderla sin que se pegue a la encimera, y se cortan las pastas, sobre las que se pondrán tres medias almendras. Se pintan con huevo.




Bueno, esto es todo por hoy. Como podéis comprobar, son recetas super calóricas, y además, a lo grande.

Roscos de Antoñita Serrano

  • 1 kilo de manteca,
  • 1 kg de azúcar,
  • 8 huevos,
  • raspadura de limón al gusto,
  • y harina, la que admita.

Se bate la manteca, y cuando esté bien batida, se le echa la raspadura, luego se echan las yemas de los huevos, que se baten con la manteca.
Se reserva una cucharada de azúcar y el resto se incorpora a la masa.
Se añade la harina. Montamos 5 claras a punto de nieve y se incopporan a la masa. Las tres claras restantes junto con la cucharada de azúcar se utilizan para untar los roscos por encima antes de meterlos en el horno.


Roscos de Rita

Para 6 huevos:
- 1/4kilo de azúcar,
la mitad del cuarto de aceite,
- 4 papelillos de gaseosa,
- harina, la que admita,
 - raspadura de limón al gusto.

Se hace un almíbar  para pasarlos, y luego se emborrizan en canela y azúcar.

Pestiños de manteca

Para un cuartillo de harina:
- 200 gr de manteca,
- 2 huevos.
- sal
- agua
(- azúcar, se entiende que para emborrizar - que es lo mismo que rebozar)

Se pone la harina en un cuenco y se le echa la manteca, que se amasará todo muy bien, se calienta una poquita de agua, con una poquita de sal,  se le echa sobre la harina, que se amasará un poco. Se baten un poco los huevos y se le ponen a la masa, que debe quedar más bien dura.


Magdalenas de Anita H., sin leche

Ingredientes
Para una docena de huevos:
- el peso de los huevos de azúcar,
- el peso de 8 huevos de harina,
- 1/2 litro de  aceite frito frío,
- raspadura de limón,
- 2 cucharaditas de levadura

Se baten las yemas con el azúcar y se le van echando el limón, la levadura, el aceite, la harina, y por último, las claras montadas a punto de nieve, sin moverlas demasiado, lo justo para mezclarlo todo bien.

Novatada 1

Me he pasado toda la mañana dando forma a la primera entrada del blog. Como me pareció seguir indagando sobre cómo darle mejor formato, sin saber cómo ni por qué, ha habido un error al actualizar y se me han borrado mis recetitas :(
Esto sólo significa que me toca empezar otra vez... Y como no hay mal que por bien no venga, aprovecharé para seguir un sabio consejo: una entrada, una receta.
En fin, que la novatada se paga...

Roscos de huevo

    Como buena cocinera que era, en la libreta de la abuela, encontramos recetas en las que sólo figuran los ingredientes. Esta pobre aprendiz de cocina (fui su pinche desde que llegaba a la encimera hasta que nos dejó) tiene que imaginarse cómo se elaboran los platos. Supongo que a medida que me vaya atreviendo con algunos, iré editando las recetas. Sin embargo, por las muchas calorías que algunas recetas tienen, no creo que me anime con ellas. Estos roscos de huevo, por ejemplo, llevan un kilo de manteca... toda la vida en las caderas...

Otra peculiaridad de esta libreta, que iré transcribiendo cuando el tiempo me lo vaya permitiendo es que en los títulos de las recetas, muchas veces figura el nombre de la persona que le dio la receta... jeje, yo hago lo mismo con mi libreta de recetas. Igual es genético. Mi hermana dice que estoy poseída por el espíritu culinario de la abuela... ojalá.



Roscos de Huevo
 Para un kilo de manteca:
- medio kilo de azúcar,
- 4 huevos,  
- canela y limón al gusto
- harina, la que admita.



Lo de "harina, la que admita" es un tema recurrente en las cocinas tradicionales, yo, personalmente lo paso fatal, porque hay que saber de masas para tener claro cuándo admite y cuándo deja de admitir...